Punto de vista: Dieguito
Pasan los días. Auxita se fue de la casa. Estoy solo, con Jorge, ella se recuperó nunca supe de qué ataque.
Fueron momentos muy angustiantes. Llegué a casa aquella noche, y la encontré en el sofá, destruída. Jorge tampoco me sabe explicar, lo último que supo es que se la llevó a Auxita a su habitación y ahí la dejó. Bo sé por qué, pero ahora adema´s de que Auxita no quiere volver a dirigirme la palabra cuando estoy dispuesto de que arreglemos una tonta peleíta de pareja como gente sibilizada, ela está en una habitación que le alquiló Jorge, muy amable y caballeroso, más caballeroso que yo, sin duda.
Los machos del barrio siguen en Madrid, creo. Los fui a visitar hace 2 noches otra vez, se fueron a recorrer creo que Barcelona, y van a volver a Madrid a saludarme cuando se vuelvan a Argentina. Hablando de eso, si logro arreglarme con Auxita planeo irnos juntos a Paraguay o a Argentina, o por qué no a Uruguay, aunque sea por unos días, como una suerte de luna de miel sin casarnos.
Ahora no sé, pero sospecho que alguien está dándole una buena companía a Auxita, alguien externo a Jorge. No la voy a celar, no se lo voy a recriminar. No, mientras no me entere de que así, por una discusión tonta, me cambió por otro.
Jorge está acá, algo de Ana me llegó a comentar, pero Auxita muchos detalles no le quiso contar. Él también está mal por mí y me va a ayudar a arreglarme con ella, me lo prometió. No me gusta ponerme cursi, lo detesto, pero francamente sin Auxita me está costando vivir más de lo que pensaba y me jode profundamente quedar como un golpeador, que yo sé que no lo soy. Yo creo que, si me quiere, tiene que comprender como funciono. No soy mala persona, de hecho le he contado toda mi vida, la gente con la que me juntaba, incluso como era mi papá, y hasta le he confesado que las escenas de celos, reproches, reclamos e histeria me dan miedo, pánico, de todo. Yo fui muy claro con eso, y ahora… ¿Cómo puede ser? Ahora resulta que no la amo, que solo quiero sexo, que soy violador, que ella no quiere dirigirme la palabra… Ah, por supuesto que le voy a dar todo el tiempo que necesite. Estamos heridos los dos y, creo, al reverendo pedo.
Por eso no quiero estar tanto tiempo con los machos, pero no es justo. Quiero seguir disfrutando la vida y lo vuelvo a repetir, Madrid me la re cagó. Francamente, todavía no me rindo pero ya no sé qué más inventar. Creo que voy a ir en una de esas y le voy a dar a Auxita la sorpresa de su vida y por supuesto, sin agresión, ni siquiera verbal.