Punto de vista: Naira
Naira entra al parque para estirar un poco las piernas
Naira se arrebuja en el anorac
mateo habla solo andando a pasos cortos
Naira mira al hombre que camina a pocos pasos de él
mateo
Mateo es un pordiosero inmundo vestido con harapos, con el pelo enmarañado, la cara tiznada y ojos saltones y extraviados.
mateo se agacha y coge un trozo de pan
Se oye un fuerte frenazo en la lejanía.
Naira se queda mirándolo
mateo mueve los labios sin pronunciar palabra
mateo sigue andando para combatir el frío
Naira se apresura al coche aparcado en la calle
Naira lo abre y saca un bulto de dentro
Naira cierra y vuelve al parque buscando al hombre con la mirada
mateo se adentra en una zona arbolada
mateo silba llamando desesperadamente a alguien
Naira lo ve y se acerca a la zona de árboles sin atreverse a entrar
una colonia de gatos sale de su escondrijo
Naira observa al pordiosero
mateo lanza el trozo de pan al suelo
Naira sigue observándolo desde el límite de la zona arbolada
los gatos se avalanzan sobre el pan peleándose entre ellos para comerlo
mateo se despide de los gatos con un gesto de la mano
Se oye un frenazo cerca de aquí.
mateo pasa cerca de naira y continúa andando sin un rumbo definido
Naira camina a pocos pasos del hombre
Murmuras con acento canario, «perdone »
dos niños ponen pasta de dientes entre dos galletas
Naira mira a los niños
mateo sigue andando absorto en su mundo
Naira suspira y queda indecisa
Naira mira alrededor un poco inquieta
uno de los niños con un teléfono en la mano ofrece la galleta a Mateo
mateo coge la galleta agradecido
Naira se acerca
Dices con acento canario, «perdone, no la coma, le han metido pasta de dientes »
mateo se come la galleta a la vez que le graban
Naira mira al niño con reprobación
el niño ríe y sale corriendo
Naira mira al hombre
Un helicóptero sobrevuela la zona a gran altura.
mateo tose terminando en un jadeo de cansancio
Naira lo mira apenada
Naira intenta llamar su atención
Dices con acento canario, «oiga»
mateo mira a naira sin verla
mateo no frena su caminata
Naira lo sigue y le ofrece la manta que usa para cubrir a yaco en el coche cuando hace mucho frío
Naira va tras él
mateo dice palabras sin sentido mmmmirando el suelo
Naira intenta darle la manta
mateo se mete entre dos quioscos
Naira lo sigue a pocos pasos
mateo se sienta protegiéndose del viento
Naira se acerca con cuidado y desdobla la manta
Murmuras con acento canario, «tenga, se sentirá mejor »
Naira le pone la manta por encima
mateo habla en silencio sin darse cuenta de la manta
Naira lo arropa
Naira lo mira con los ojos empañados
mateo continúa tiritando
Un helicóptero sobrevuela la zona a gran altura.
Naira intenta que la manta le cubra más
mateo murmura con acento lavapiense, «me suena tu rostro»
mateo murmura con acento lavapiense, «padezco frío»
Murmuras con acento canario, «no lo sé »
Murmuras con acento canario, «quiere que le traiga algo caliente?»
mateo habla mirando el suelo
mateo murmura con acento lavapiense, «me dejaron para siempre»
mateo murmura con acento lavapiense, «nadie hay, quién hay? nadie»
Murmuras con acento canario, «ahora vuelvo, no se mueva de aquí, vengo enseguida »
mateo murmura con acento lavapiense, «descalzo? descalzo »
Naira sale de entre los quioscos y se aleja hacia la peluquería
mateo murmura con acento lavapiense, «cansado? cansado»
mateo murmura con acento lavapiense, «soy? yo no soy»
Naira regresa al parque al cabo de varios minutos y se mete entre los quioscos
Naira le aparta un poco la manta y pone un vaso de café con leche en su mano
mateo murmura con acento lavapiense, «dios hace tiempo que nos abandonó»
Murmuras con acento canario, «beba esto »
Naira le acompaña la mano con el vaso hasta la boca
mateo bebe el café en un gesto mecánico
Naira le coge el vaso cuando ve que ha terminado y lo tira a una papelera
mateo murmura con acento lavapiense, «hoy tengo? no tengo»
Naira saca un envoltorio del bolsillo, lo destapa y le acerca un bocadillo a la mano
Murmuras con acento canario, «coma esto »
mateo se levanta sin percatarse del bocadillo y sale de entre los quioscos
Naira suspira y recoge la manta
Naira se lo piensa y la deja doblada entre los quioscos
Naira deja el bocadillo sobre la manta
Naira lo mira y niega
Naira lo envuelve de nuevo y lo deja entre los pliegues de la manta
mateo habla con una persona que le vende un tetrabrik de vino tinto
Naira sale de entre los quioscos y ve al hombre con el vino
Murmuras con acento canario, «lo siento, no puedo hacer más »
mateo vuelve entre los quioscos bebiendo vino de forma desesperada
Naira lo mira sin acercarse
mateo sigue hablando solo
Naira suspira y se aleja entristecida
mateo termina el tetrabrik en pocos tragos
mateo lanza el cartón al suelo
mateo apoya la cabeza en el quiosco y se sienta con una sonrisa
mateo queda dormido abrazándose.