punto de vista arnulfo
Comunidad de Madrid; Torre de Madrid.
Ves un tablón de anuncios y el ascensor de la torre de madrid aquí.
Salidas visibles: fuera
arnulfo llega del trabajo, lee el tablón como de costumbre
el último anuncio llama la atención de arnulfo, por ver una foto de romina adjunta. lo lee en voz alta
dices, Hola a todo aquel que tenga la oportunidad de leer este anuncio, desde ya pido disculpas por las molestias que podría ocasionar. Busco a una persona que vive en Madrid, necesito encontrarla de forma urgente. Es una chica de 20 años y se llama Romina Méndez; de nacionalidad argentina, bastante atractiva físicamente tal como la ven en la foto que adjunto. Ante cualquier información que tengan sobre ella, dejo mi número de móvil y mi dirección de correo electrónico de modo a que puedan contactarme, necesito encontrar a esta chica con suma urgencia. Solo pido que cualquier información que se me proporcione sea verdadera, es muy importante para mí encontrar a esta mujer. Desde ya agradezco cualquier comunicación que pueda recibir por parte de ustedes. Los saluda atentamente, Margarita Barrios.» *al costado derecho del anuncio se ve una foto de Romina, y bajo ella los contactos de Margarita*
arnulfo queda pensativo por un rato; posteriormente decide enviarle un mensaje a romina
SMS enviado: «hola, amor; acabo de ver el tablón y hay un anuncio de alguien que te busca con urgencia. sé que se trata de ti porque han publicado una foto tuya en el anuncio; te amo»
arnulfo vuelve a leer el anuncio, por si se trata de un error
[SMS] Romina: «Hola, vida…qué? en serio? a ver…te llamo porque no puedo creer lo que me contás. un beso.»
arnulfo no se percata del mensaje de romina hasta que el tono de llamada lo saca de sus pensamientos
Llamada entrante de Romina.
Un teléfono suena en este lugar.
Descuelgas la llamada y se establece la comunicación.
Dices por teléfono, «hola ¿cómo estás?»
Romina te dice por teléfono, «hola cariño…bien, aunque un poco intrigada. Como es eso de que me buscan?»
Dices por teléfono, «una mujer llamada margarita barrios; por el correo electrónico que ha dejado deduzco que es argentina»
Romina te dice por teléfono, «Margarita Barrios…argentina…tiene mi foto? No, eso no puede ser…Dónde viste eso, cielo?»
Dices por teléfono, «el número del anuncio se parece a uno de… justo una mujer que conocí hace poco… también se llama margarita»
arnulfo asiente, olvidando que romina no puede verlo porque no está con él
Dices por teléfono, «justo lo estoy viendo en el tablón de la torre»
Romina te dice por teléfono, «en la torre donde está tu casa? A ver, esperá que voy a verlo yo misma porque me cuesta creer. Te veo ahí, amor.»
el ascensor de la torre de madrid cierra las puertas y se pone en movimiento.
el ascensor de la torre de madrid acava de pararse en La planta número 19.
Dices por teléfono, «velo por ti misma, cielo y en efecto, está pegado en la planta baja, por eso es que lo vi»
Romina te dice por teléfono, «sí, a vos te creo, lo que no creo en realidad es…bueno, ya te cuento cuando llegue. Te amo.»
Dices por teléfono, «yo también te amo, hermosa»
Romina ha colgado.
tras varios minutos…
Romina ha llegado.
Romina entra apresurada a la torre y ve a Arnulfo a penas llegar
arnulfo la saluda con un gesto, señalándole el tablón
Romina se le acerca, con expresión de preocupación.
Romina se fija en el tablón y al poco tiempo encuentra el anuncio con su foto, leyéndolo detenidamente.
Romina suspira, pasándose una mano por la cara.
Romina dice: «no puede ser, en serio. No se pudo haber dejado manipular así.»
el ascensor de la torre de madrid llega y las puertas se abren.
observas como la gente va y viene.
arnulfo recuerda las dos ocasiones en las que margarita le dijo que buscaba a alguien
Dices: «me dijo que estaba buscando una persona, pero no me dijo nada más»
AriaBlaid abandona el ascensor de la torre de madrid.
AriaBlaid se marcha.
Romina lo mira, sin entender mientras se le acerca, moviendo un poco la silla alejándose del ascensor que se acaba de abrir.
arnulfo golpea el apoya brazos de la silla
escuchas jaleos y gritos a lo lejos
Romina dice: «entonces sí la conocías…bueno, vamos a tu casa y charlamos? No me siento bien para salir y menos con esto…»
Dices: «te cuento en la casa»
Romina asiente y conduce la silla de Arnulfo, adentrándola en el ascensor.
Romina entra en el ascensor de la torre de madrid.
entras en el ascensor de la torre de madrid.
el ascensor de la torre de madrid
Te encuentras con Romina.
Salidas visibles: nada
Romina acomoda la silla y pulsa el botón 4.
El ascensor cierra las puertas y se pone en marcha.
el ascensor de la torre de madrid para en La planta número 4 y las puertas se abren.
Romina sale llevándose la silla casi con impulsividad
Romina sale.
sales del elevador.
La planta número 4
Ves casa de oscar, casa de arnulfo, hogar de dámaso, una casa en venta, y el ascensor de la torre de madrid aquí.
Te encuentras con Romina.
Salidas visibles: nada
Romina se da cuenta y enlentece el paso, dirigiéndose a casa de arnulfo
Romina acerca la silla a la puerta
arnulfo saca las llaves, disponiéndose a abrir
Abres la puerta de la casa.
Romina lo adentra lentamente por la rampa de acceso.
Romina entra en casa de arnulfo.
Entras en la casa.
casa de arnulfo
Te encuentras con Romina.
Salidas visibles: nada
Romina cierra la puerta.
Romina lleva la silla de Arnulfo hasta cerca de un sillón, en el cual se deja caer pesadamente.
Romina dice: «bueno, contame vos primero, luego te digo quien es ella.»
arnulfo respira profundo
Dices: «a esa margarita que te digo la conocí en el restaurante mientras cubría mi turno»
Romina dice: «ah, labura en lo de las hamburguesas también entonces. Ya es raro que no hayamos coincidido antes.»
Dices: «dijo que era maestra y que vino a españa a buscar a una persona; pero en ese momento no mencionó de quién se trataba»
Romina suspira y asiente
arnulfo suspira recordando algo
Dices: «luego la encontré en el café del club»
Dices: «llegó también otra chica… nos preguntó cómo podía hacer para encontrar a una persona…»
Dices: «nos dio su número y…»
Romina dice: «ah miira…anda por los mismos lugares que yo frecuento pero no la he visto, la verdad.»
Romina mira a arnulfo al ver que al parecer algo lo preocupa.
arnulfo golpea los apoya brazos de la silla
Romina dice: «y qué?»
Romina le toma ambas manos entre las suyas y se las masajea suavemente.
Dices: «que yo le di la idea del tablón; mucha gente vive aquí así que muchos podían leer el anuncio»
Romina se muerde los labios y asiente de nuevo.
Romina dice: «bueno tranquilo…no sabías de quien se trataba, solo la querías ayudar.»
Dices: «sí… en serio que si hubiera sabido que te buscaba a ti no le hubiera dado la idea…»
Romina suspira profundamente, mirando al techo como para procurar mantenerse tranquila ante arnulfo
Romina lo vuelve a mirar, se le acerca y lo besa
arnulfo corresponde al beso; respirando para tranquilizarse
Romina se separa y lo mira fijamente, notándolo tenso.
Romina murmura: «bueno, ahora habré de ver qué hacer, ella no va descansar hasta encontrarme y llevarme para allá, quien sabe con qué invento me estará viniendo…no conozco a nadie acá, no tengo recursos casi…en serio no sé a dónde iré a parar.»
toque el manto de daniel y pare de sufrir. Mundo virtual guardado.
Romina se aleja de arnulfo y se recuesta por completo del sillón, entrecerrando los ojos
arnulfo parece recordar algo
arnulfo dice lo primero que se le viene a la mente
Dices: «hotel de preciados, habitación 103…»
Romina abre los ojos y mira a arnulfo mientras se incorpora.
Romina dice: «está ahí? Bueno…Madrid es muy grande, supongo que podría, no sé, irme a otro lugar porque si ya conoce hasta el club…»
Murmuras: «sí, eso era»
Romina suspira.
Dices: «sí; eso fue lo que dijo las dos ocasiones que la vi»
Romina dice: «ya veo…bueno, te cuento más de ella.»
Romina se acomoda en el sillón
Romina dice: «efectivamente es maestra. Fue mi profesora en guardería y nivel inicial, luego en algo me siguió apoyando porque claro, mis papás le pagaban al darse cuenta que era la única que me entendía, por decirlo así.»
Romina dice: «le llegué a tomar un gran cariño, mis papás también, sobre todo mi mamá. Muchas veces fue su pañuelito de lágrimas incluso…se hicieron grandes amigas.»
Romina dice: «somos tan pero tan unidas que, hace tiempo dejé de llamarle profe o tía como le decía cuando era una pendejita…que ahora la trato como a una amiga y le digo Magy, como le gusta que le digan.»
arnulfo escucha atento
Dices: «magui!»
Dices: «así dijo que podíamos llamarla»
Romina dice: «ah sí, es que es muy sociable y simplifica las cosas…prefiere que le digan así.»
Dices: «sí, la verdad es que es vastante sociable»
Romina dice: «yo la quiero mucho, pero me está costando creer que se haya dejado manipular así por mi mamá y mi papá…capaz recibió plata de ellos para viajar…de hecho ella fue la que contactó conmigo aquella primera vez para contarme que él tuvo el infarto o lo que sea que le haya dado.»
arnulfo piensa en algo
Romina suspira de nuevo, sigue jugueteando con los dedos de arnulfo mientras lo mira
Dices: «ella no sabe dónde vivo porque no alcancé a decirlo gracias a una de esas veces que me quedo abstraído»
Romina se le acerca más, clavando sus ojos en él y esbozando poco a poco una tenue, aunque cada vez más amplia sonrisa.
arnulfo esboza una leve sonrisa, casi imperceptible
Romina murmura: «vos decís que…podría…mmm»
Romina niega, aunque sus ojos la contradicen con un brillo ilusionado
Romina murmura: «mi vida…»
Dices: «pues… a menos que busque entre los más de 20 pisos que tiene la torre no te encontraría»
Dices: «para eso tendría qué estar casa por casa…»
Romina le suelta las manos y le acaricia ambas mejillas
Romina piensa y asiente, sonriendo
Romina dice: «ay mi amor…yo…no sé qué decirte.»
Romina dice: «solo que…que sos único, y que creo que me vas a salvar de hacer algo que no quiero…»
Sonríes.
Romina se acerca y lo abraza
Dices: «no tienes qué hacerlo si no quieres»
arnulfo la abraza, se nota ahora más tranquilo
Romina levanta a penas la cabeza del abrazo y niega.
Dices: «como no me dijo que te buscaba, tampoco pude decirle que estabas en el club»
Dices: «en todo caso tengo entendido que por confidencialidad o algo así, no pueden revelar tan fácilmente el número de habitación de sus huéspedes. a menos que tenga una orden judicial, cosa que no tiene porque legalmente no has hecho nada y ella no es policía»
Romina lo escucha con atención y asiente.
Romina dice: «pero igual, si me dijiste que vivir acá con vos sería una solución factible, me encantaría de todas formas si no tenés problema. Aunque claro, todo lo que decís es cierto también»
Sonríes.
Dices: «por mi no tengo problema, qué cosas dices»
Romina también sonríe, luego le da un beso
Romina se separa y lo mira con la expresión algo más relajada.
Romina dice: «bueno, está decidido, voy a venir a vivir acá con vos. Porque sabes?»
Romina suspira, bajando un poco la mirada
arnulfo relaja totalmente su expresión
Romina dice: «en serio no me quiero ir, quien sabe lo que me espera allá. Otra vez esa vida fingida de sociedad que odio, otra vez a potestad de lo que mis viejos quieran hacer conmigo…ciertamente acá tampoco estoy llegando a mi meta de ser modelo, pero mientras no les tenga a esos 2 acá diciéndome todo el tiempo lo que tengo que hacer, hay esperanzas de surgir en lo que más amo»
Dices: «no te había mencionado lo de vivir juntos para no apresurar las cosas, pero mira»
arnulfo la mira a los ojos
Romina corresponde a la mirada con curiosidad.
Dices: «oye pero ya eres mayor de edad; así que no tendrían por qué decidir sobre tu vida, digo yo»
Romina dice: «claro, es lo que yo también pienso, Arni, pero si estoy allá, no me van a dejar en paz. Mi papá tiene muchos amigos casi por toda Argentina, no pararían de fastidiarme al menos por medio de esos, entendés? Y claro, no pararían hasta llevarme a casa, aunque sea a la fuerza. Están obsesionados conmigo, amor»
Romina dice: «si al menos respetaran mi decisión de ser modelo no te digo, pero además de no respetarla, quieren que haga exactamente lo que a ellos les parece, y yo no nací para eso.»
Suspiras profundamente.
Romina dice: «así que nada, voy a venir acá, voy a ver como laburar…y no sé, adquirir nacionalidad y vivir en España para siempre. Pero allá no me llevan ni en un cajón, Arni. Eso lo tengo más que asumido y por mucho que no les guste se lo van a tener que tragar.»
Dices: «seguro lo hacen con la excusa de que quieren lo mejor para ti, sin embargo ignoran que lo mejor para nosotros es dejarnos ser»
Romina dice: «así mismo es, cielo. pero no hay excusa que valga, primero estoy yo, aunque ellos tengan mal enfocada la cosa.»
Romina se levanta del sillón, mirando a arnulfo.
arnulfo la mira con curiosidad
Romina dice: «bueno, voy a traer mis cosas y desalquilar la habitación, de paso me ahorro eso que voy pagando para ver si por ahí me pudiera comprar una casa también a futuro.»
Murmuras: «de vez en cuando tengo pesadillas, así que no te asustes»
Romina sonríe
arnulfo sonríe con un toque de emoción en su mirada
Romina murmura: «tranquilo, ya me voy a acostumbrar a ellas seguramente.»
Dices: «eso de tu casa es genial; un tiempo en mi casa, otro más en la tuya…»
Te partes de risa.
Romina se ríe con él.
Romina dice: «sería espectacular! Me parece que voy a tener que irme a manejar ese camión gigante que me contaron…ahí pagan bien y podría ahorrar más. No es que me guste hacer eso pero bueno…»
Romina dice: «más que nunca necesito guita, más que nunca sé lo que quiero ahora.»
Dices: «una modelo en cendo camión… ains»
Romina se parte de risa.
Dices: «700 por reparto; es lo que pagan»
Romina se sorprende
Romina dice: «ah miiira, es bastante! algo voy a poder ahorrar.»
Romina sonríe
arnulfo asiente
Dices: «sólo dos veces trabajé ahí, por eso es que sé lo que pagan»
Romina dice: «entiendo…bueno, voy a traer mis cosas, desalquilar la habitación y regreso contigo. Traigo algo para comer del centro comercial?»
Romina dice: «o alguna cosa en general que falte en la casa»
Dices: «mmm ains qué cabeza»
Romina sonríe, se vuelve a agachar y le besa en la cabeza, alborotándole un poco el pelo.
Dices: «por ahora sólo algo para comer»
Romina dice: «a ver si se te mueven un poquitito esos pensamientos.»
arnulfo sonríe
Romina se incorpora y asiente
Dices: «ya luego veremos lo que falta»
Romina dice: «súper, mi vida»
Dices: «y de paso me ayudas a decorarla, que por ahora sólo puse esos cuadros que ves»
arnulfo señala los cuadros que cuelgan en la pared
Romina los mira y asiente
Romina dice: «genial, me va encantar ayudarte en eso y en lo que quieras, mi amor»
Romina se acomoda y vuelve a besarlo con profundidad en los labios.
arnulfo profundiza jugando con la lengua
Romina se aprieta a él con fuerza, dando mayor profundidad al beso.
arnulfo le alborota el pelo
Romina se separa a penas un poco para suspirar, algo extasiada.
Romina le muerde ligeramente los labios a arnulfo, luego se separa mirando hacia la puerta.
Romina murmura: «no tardo, mi corazón. Te amo, no lo olvides»
Dices: «yo también. iré por un duplicado de la llave para que tù la tengas»
Romina se dirige hacia la puerta para salir, pero se gira al escuchar a arnulfo y asiente.
Dices: «que en una de esas no me encuentras y tendrás qué esperar afuera y éso como que no»
Romina se ríe.
arnulfo ríe al recordar algo
Romina dice: «es cierto. Bien pensado, Arni de mi vida.»
A Romina se le ilumina el rostro al ver reír a Arnulfo.
arnulfo se acerca a ella y juega con su pelo, riendo travieso
Romina le besa la nariz y le pellizca un poco las mejillas.
Murmuras: «mira tú»
arnulfo le hace cosquillas
Romina le guiña un ojo y se ríe juguetona.
Romina murmura: «vos empezaste con el jueguito, bebote hermoso de romi.»
Te partes de risa.
Romina dice: «y esa risotada por qué?»
Romina sonríe mientras arrima mucho su rostro al de arnulfo.
Murmuras: «porque me gusta estar contigo»
Romina murmura: «a mí también, hermosote de mi corazón.»
Romina le vuelve a besar la nariz
arnulfo pasa sus dedos por la cara de romina, haciendo movimientos circulares
Romina sonríe
Romina murmura: «parece que además de algo de comer, voy a comprar algún detallito más del centro comercial…con el frío de esta noche estaría muy buena una tormenta de cariñitos.»
arnulfo sonríe pícaro
Dices: «uy qué será…»
Romina lo besa en el cuello, mordiéndolo suavemente.
Romina lo mira con un brillo travieso en los ojos
Romina murmura: «ya vas a ver,pero dejame ir, que se me hace tarde, bebote.»
Dices: «ay sí, que tengo qué ir con la encargada de mantenimiento por el duplicado»
Romina se incorpora otra vez
Romina dice: «bueno, pero ahora vas a estar para abrirme a la vuelta, no? creo que no hay apuro con eso por ahora»
Dices: «aquí estaré; que no quiero encontrarte haciendo guardia afuera como soldado»
Romina dice: «ya me vas a enseñar como se hace ese saludo militar…»
Dices: «uy…»
Dices: «que luego van a decir los becinos que soy un desconsiderado por dejar afuera a semejante ángel»
Romina sonríe
arnulfo mira una caja que está cerca de la cocina
Romina dice: «bueno mi amor, intento no tardar, si?»
Dices: «vale; mientras armo lo de la caja»
Romina sigue su mirada, aunque luego se dirige a la puerta.
Romina camina, mirándolo de reojo
arnulfo desvía la mirada de la caja y le guiña un ojo
Romina dice: «no sé qué sea, pero si no vas a poder solo esperame, que te ayudo a armarlo.»
Dices: «es un altavoz de esos que están sacando»
Romina se acerca a la caja y mira el dibujo de muestra que tiene; abre los ojos con gran sorpresa.
Romina dice: «uuuh, parece de los buenos!»
Dices: «mira que hasta cámara de vigilancia tiene»
Romina dice: «qué genial, cuando venga lo programamos y eso, dale?»
Dices: «sí»
Romina le lanza un beso, se gira hacia la puerta y camina con pasos sensuales de frente a Arnulfo.
arnulfo se recrea con la imagen de romina, lanzándole un beso
Romina abre la puerta, vuelve a girarse hacia arnulfo, le guiña un ojo y sale, cerrando despacio
después de un tiempo romina llega con sus cosas y algo de comida. arnulfo la ayuda a instalarse, para luego armar juntos el altavoz y pasar una noche de maravilla