Punto de vista: Aletheia
Comunidad de Madrid; Finca el Renacimiento
Ves Nisan Moco, un vehículo blindado, y un coche deportivo de color negro aquí.
Alethehia cierra la puerta de la casa.
Aletheia desactiva la alarma y abre la puerta del vehículo
Aletheia sube al coche y deja la mochila en el asiento del copiloto
un coche deportivo de color negro
Aletheia cierra la puerta y se abrocha el cinturón
Aletheia introduce la llave y arranca el motor
[EFU] Aletheia: «permiso para abandonar zona s.y. finca el renacimiento, destino Fresnedillas de la oliva»
[EFU] Aras: «S.y. autoriza la solicitud.»
Aletheia pisa el acelerador y el coche se pone en movimiento
Cincuenta minutos después…
Aletheia reduce la velocidad al llegar a su destino y se estaciona
Aletheia apaga el motor y se desabrocha el cinturón
Aletheia abre la puerta del vehículo
Comunidad de Madrid; Un paraje natural en Fresnedillas de la Oliva
Ves un coche deportivo de color negro aquí.
Aletheia cierra la puerta del vehículo y activa la alarma
Tras identificarte debidamente, se te conduce a la zona de entrenamiento.
Comunidad de Madrid; Zona de vehículos.
Ves rinault migane y Grand Keroky 4×4 Lim aquí.
Unos soldados escoltan a un coche deportivo de color negro hasta esta zona.
Zona de entrenamiento de Firme Unidad.
Aletheia entra en el edificio de la ALID, va hasta los dormitorios y se cambia de ropa. Sale a los entrenos
Dos horas después…
Aletheia está terminando una rutina de estiramientos cuando Juanjo se le acerca
Juanjo la mira
Juanjo dice: «Para ser una ALID no estás tan mal; añadiré otras rutinas, una media hora más de entreno si estás de acuerdo, Moira.»
Aletheia termina y se levanta, asiente.
Dices con acento catalán, «hazme llegar la nueva tabla; si me permites, voy a firmar el control de asistencia»
Juanjo asiente en silencio
Aletheia se marcha al edificio de la ALID
Juanjo la ve marchar, pensativo.
Edificio de la ALID.
Aletheia firma el control de asistencia y se encamina a los dormitorios
Aletheia entra en el edificio de dormitorios
Dormitorios
Kalev la ve llegar y se le acerca
Kalev murmura con acento ruso, «buenas tardes, Moira. cómo estás?»
Murmuras con acento catalán, «Pues, bien… iba a llamarte anoche, pero me puse a trabajar y se hizo demasiado tarde.»
Kalev asiente
Kalev murmura con acento ruso, «de todas maneras, puedes llamarme a la hora que sea si lo necesitas, Moira»
Murmuras con acento catalán, «gracias. Crees que podamos vernos cuando termines? fuera de aquí, por supuesto. Tengo que comentarte algunas cosas.»
Kalev murmura con acento ruso, «claro, sin problema.»
Kalev la mira detenidamente
Kalev murmura con acento ruso, «seguro estás bien?»
Murmuras con acento catalán, «sí, no ocurre nada malo, tranquilo»
Kalev asiente
Kalev murmura con acento ruso, «nos vemos en la cafetería en Fresnedillas, vale?»
Murmuras con acento catalán, «de acuerdo, nos vemos ahí.»
Kalev sale a los entrenos
Aletheia se da una ducha, se cambia y recoge todo en su mochila. Sale del edificio y va a la zona de vehículos
Zona de entrenamiento de Firme Unidad.
Al salir a la zona de entrenamientos, Aletheia ve a Kalev entrenando. Lo observa unos diez minutos y se marcha.
Comunidad de Madrid; Zona de vehículos.
Ves rinault migane, Grand Keroky 4×4 Lim, y un coche deportivo de color negro aquí.
Aletheia se acerca a su coche
Aletheia desactiva la alarma y abre la puerta del vehículo
un coche deportivo de color negro
Aletheia deja la mochila en el asiento del copiloto
Aletheia cierra la puerta y se abrocha el cinturón
Aletheia introduce la llave y arranca el motor
Aletheia pisa el acelerador y el coche se pone en movimiento
Aletheia reduce la velocidad al llegar a Fresnedillas
Mirando por los cristales puedes ver:
Comunidad de Madrid; Fresnedillas de la Oliva
Aletheia va conduciendo haciendo tiempo mientras Kalev termina
Aletheia se estaciona.
Aletheia coge su móvil y envía un mensaje
SMS enviado: «Te espero en el restaurante, la cafetería está cerrada.»
Aletheia apaga el motor y se desabrocha el cinturón
Aletheia abre la puerta del vehículo
Aletheia baja del coche
Comunidad de Madrid; Calle Real
Ves un coche deportivo de color negro aquí.
Aletheia cierra la puerta del vehículo y activa la alarma
aletheia mira el reloj, A Kalev todavía le falta un rato para terminar.
Aletheia echa a andar, paseando por los alrededores.
Comunidad de Madrid; Plaza del centenario
Las bajas temperaturas mantienen un ambiente gélido.
escuchas unas explosiones en la lejanía.
Comunidad de Madrid; Calle de Barrio Palacio
Aletheia camina acercándose a un parque
Parque
Se trata de un acogedor parque con un caño, antiguo descansadero de ganado. Los fresnos flanquean los caminos por los que se puede pasear, y hay una zona de esparcimiento para niños.
Aletheia sale del parque y sigue andando
Fuente de la Zorra
Ves una fuente de piedra aquí.
Llegas a lo alto del camino.
bajas por el camino.
Comunidad de Madrid; Calle de la Fuente de la Zorra
Llegas a la calle tras el corto descenso.
Aletheia sigue andando, mirando el lugar con detenimiento, es un sitio encantador.
Aletheia se acomoda el anorac y vuelve a la calle Real
Comunidad de Madrid; Calle Real
Ves un coche deportivo de color negro aquí.
Aletheia pasa delante de su coche y sigue hacia un camino
Comunidad de Madrid; Fresnedillas de la Oliva
Bajas por un camino a las afueras.
Arroyo de la Chorrera
Llegas a orillas de un arroyo.
Todo el entorno está cubierto de jara, retama, tomillo y zarzamora. Los pinares, de pino negral y piñonero, se encuentran formando pequeños rodales en las proximidades. La zona presenta una vegetación de ribera constituida por fresnos, sauces y rosáceas.
Subes por un camino alejándote del arroyo.
Comunidad de Madrid; Fresnedillas de la Oliva
Llegas a lo alto del camino tras tu ascenso.
Las bajas temperaturas mantienen un ambiente gélido.
Comunidad de Madrid; Calle Real
Ves un coche deportivo de color negro aquí.
Aletheia mira el reloj, decide entrar en el restaurante
Restaurante La Leña
Te encuentras en un restaurante de estilo rústico con una chimenea central redonda que se mantiene encendida durante todo el invierno. Hay mesas alrededor, algunas con bancos corridos, y la decoración invoca escenas de la vida cotidiana en el campo. Tradicionalmente, los Quintos celebran aquí su fiesta la noche del 31 de diciembre.
Aletheia se sienta en una mesa con el banco pegado a la pared
Una camarera le da las buenas tardes
Murmuras con acento catalán, «buenas tardes»
La camarera le ofrece la carta
Aletheia mira su reloj y suspira
Murmuras con acento catalán, «solo pediré agua, gracias.»
la camarera asiente y se aleja.
Kalev entra al restaurante, se fija en la mesa donde Aletheia está sentada y se acerca.
Aletheia juega con las servilletas en la mesa; alza la mirada y ve a Kalev
Kalev murmura con acento ruso, «hola, preciosa.»
Murmuras con acento catalán, «hola, qué tal ha ido el entreno?»
Kalev aparta uno de los bancos y se sienta a su lado
Kalev murmura con acento ruso, «bien; me dilaté firmando el control de asistencia y hablando con Jeanpaul, que estaba entrando para firmarlo también.»
Murmuras con acento catalán, «vale, no hay problema. estuve paseando un rato mientras te esperaba.»
la camarera trae el botellín de agua junto con un vaso
La camarera se aleja y vuelve con la carta, se la tiende a Kalev y espera.
Kalev mira la carta con rapidez y pide lo que va a comer. La camarera anota, recoge la carta y se marcha hacia la cocina.
Kalev abre el botellín y sirve el agua en el vaso, se lo acerca a la chica
Murmuras con acento catalán, «gracias, Kalev.»
Kalev le coge de la mano
Kalev murmura con acento ruso, «te noto muy abstraída; me quieres contar qué te pasa?»
Aletheia lo mira
Murmuras con acento catalán, «ya he hablado con la persona que te comenté.»
Kalev la coge con más firmeza de la mano
Kalev murmura con acento ruso, «y bien? Por tu cara pareciera que no son buenas noticias las que me tienes.»
Aletheia suspira y niega
Murmuras con acento catalán, «no es eso, es solo que el tema me incomoda. Hoy me siento mejor, pero aún no se me pasa del todo la incomodidad; sigo con el ego un poco mallugado.»
Kalev asiente, comprensivo.
La camarera llega con la comida y otro botellín de agua junto con un vaso; coloca todo en la mesa y se retira.
Kalev la mira a los ojos, Aletheia le sostiene la mirada.
Kalev murmura con acento ruso, «y bien, qué te dijo tu compañero?»
Aletheia suspira
Murmuras con acento catalán, «que su trabajo no le permite implicarse emocionalmente y tener pareja.»
Kalev va a llevarse un trozo de carne a la boca y se frena de golpe, deja el tenedor en el plato.
Kalev la mira, sorprendido
Kalev murmura con acento ruso, «pensé que solo ibas a comentarle que te gustaba.»
Murmuras con acento catalán, «eso hice, pero cuando preguntó si había algo más e intentaba explicarle lo que me ocurrió estos días, eso de darme cuenta de pronto que estaba un poco más implicada de la cuenta, al no saber cómo explicarle me dijo que me ayudaba y soltó eso. pero bueno, creo que en medio de todo le tiene que haber quedado claro que no esperaba, ni espero que con él ocurra nada, al menos intenté hacerme entender.»
Kalev murmura con acento ruso, «ah, bueno, quizá se lo tiene muy creído… puede que pensara que te le ibas a lanzar a los brazos, a violarlo o algo así.»»
Kalev sonríe
Aletheia esboza una sonrisa y niega
Murmuras con acento catalán, «deja…tonto»
Kalev sonríe y empieza a comer de nuevo, le hace un gesto para que siga hablando
Murmuras con acento catalán, «De verdad no creo, me parece que no le dio importancia, en realidad.»
Kalev la mira
Kalev murmura con acento ruso, «Como que no le dio importancia, a qué te refieres?»
Aletheia lo mira a los ojos
Murmuras con acento catalán, «Verás, es que no mostró nada, ni sorpresa, ni enfado, ni siquiera satisfacción, reaccionó con una naturalidad un poco pasmosa, si te soy franca; así, como cuando dices, oye, que está lloviendo y la persona mira por la ventana y dice .. pues sí, sí que llueve.»
Kalev se carcajea con el ejemplo.
Aletheia sonríe.
Murmuras con acento catalán, «ya hablando en serio, quizá en principio no me hice entender;»
Kalev mastica y traga
Kalev murmura con acento ruso, «ostras, pues qué tanto hay que entenderle a que te digan que se sienten atraídas por ti?»
Aletheia sonríe.
Murmuras con acento catalán, «lo digo porque me estuvo preguntando si había algo más que enlazarle a eso.»
Kalev se lleva el tenedor a la boca, pensativo.
Kalev sonríe con picardía.
Kalev murmura con acento ruso, «pues a la atracción sexual se le puede enlazar la cama, las sábanas, incluso juguetes eróticos.»
Aletheia se carcajea
Murmuras con acento catalán, «no, hombre, deja las bromas. Se refería a lo emocional. ahí fue cuando me soltó eso de que no puede tener pareja y tal, lo que te comenté al principio.»
Kalev asiente.»
Murmuras con acento catalán, «pero lo que en realidad importa, es que me quité una buena parte de ansiedad, porque pensaba que iba a enfadarse, a molestarle, no sé… llegué a pensar que quizá hasta le daban fastidio esas cosas.»
Kalev la mira, incrédulo
Kalev murmura con acento ruso, «pues habría que estar muy muerto en vida para que una mujer como tú le diga a un hombre que se siente atraída y este no sienta aunque sea, un fresquito en el ego.»
Kalev se ríe
Aletheia se ríe
Murmuras con acento catalán, «pues este hombre me dio las gracias por lo que le tocaba, fue muy … no sé ni como definirlo y se marchó.»
Aletheia bebe agua
Kalev come y la mira, pensativo
Kalev murmura con acento ruso, «así, sin deciros nada más, como quien te saluda en la calle y sigue?»
Aletheia asiente y alza el vaso, bebe despacio.
Murmuras con acento catalán, «me dijo un par de cosas que me fastidiaron el ego, pero que no merece la pena sacar a colación ahora. Y eso fue todo.»
Kalev abre el botellín, se sirve en el vaso y bebe.
Kalev murmura con acento ruso, «joder, macho, que tio tan frío, no?»
Aletheia se encoge de hombros.
Murmuras con acento catalán, «ni idea, yo no puedo hablar de cómo es, le conozco poco. solo sé que le jode implicarse emocionalmente y que decidió no tener pareja.»
Kalev murmura con acento ruso, «venga ya; no tienes que ser pareja para tener sexo. Ni tienes que estar implicado emocionalmente para tenerlo. El sexo es sano. Me sorprende que ni siquiera mencionase esa posibilidad, tener una amistad cercana, no sé, con derecho a roce. Si anda por la vida sin tener sexo con nadie, me haré fans de ese tío, te lo juro»»
Aletheia se ríe
Tupolev 160 despega de la base militar de s. y.
Murmuras con acento catalán, «imagino que sexo sí que tendrá, kalev; pero con mujeres que le atraigan y ya. No va a acostarse con una mujer solo porque esta le diga que le atrae sexualmente. bueno, eso creo yo, pero ni idea»
Kalev termina de comer
tupolev 160 sobrevuela las afueras de madrid
Kalev murmura con acento ruso, «sí, cualquier cosa puede ser; pero sin duda ese hombre… »
Kalev piensa y niega
Kalev murmura con acento ruso, «en fin… tú como te sientes al respecto?»
Murmuras con acento catalán, «como te dije al principio, con el ego un poco mallugado; pero bien. Hoy me siento mejor, solo es que al pensar en la conversación algunas cosas me incomodan.»
Murmuras con acento catalán, «claro que incluso hablar contigo me hace sentir mejor.»
Kalev asiente
Kalev murmura con acento ruso, «y has podido analizar lo que sientes respecto de él?»
Murmuras con acento catalán, «un poco sí. estoy algo más implicada de lo que incluso me gusta, pero … no llego a estar enamorada. »
Kalev murmura con acento ruso, «cómo lo sabes? digo, que no estás enamorada?»
Murmuras con acento catalán, «verás… cuando me enamoro yo me enfoco a plenitud en esa persona. en esos momentos, no importa que se me ponga delante el hombre más guapo del mundo, para mí, no existe y punto.»
Kalev murmura con acento ruso, «entiendo que este no es el caso»
Murmuras con acento catalán, «no, no lo es… »
Murmuras con acento catalán, «incluso pensando en esa conversación, me di cuenta que su frialdad, esa indiferencia ante lo que yo estaba comentando tuvo sus efectos y siempre se lo voy a agradecer.»
Murmuras con acento catalán, «si estuviese enamorada, ante él habría reaccionado de otra forma»
Kalev murmura con acento ruso, «comprendo… eso quiere decir…»
Kalev le coge de la mano
Aletheia niega mirándole a los ojos
Murmuras con acento catalán, «no quiere decir nada, Kalev. He sido siempre honesta, lo seguiré siendo. No diré que no me eres indiferente, que no disfrute de tu compañía; incluso no negaré que es más que posible que se diera una amistad cercana con derecho a roce contigo, pero…»
Kalev murmura con acento ruso, «pero qué? Por lo que dices ese tío ni se inmutó, no quiere nada contigo, no?»
Murmuras con acento catalán, «sí, no quiere nada conmigo y ni se inmutó, pero en este momento no es conveniente. Mientras yo siga tan atraída; mientras todavía sienta esta implicación, no puedo meterme con nadie más. Al menos no hasta que resuelva este tema y esté más relajada y enfocada. Ya sabes que otro desliz y lo más probable es que quedemos fuera de manera definitiva.»
Kalev le besa la mano, Aletheia suspira
Kalev murmura con acento ruso, «creo que exageras; pero sí concuerdo en que podríamos vernos en problemas si no nos vamos con cuidado.»
Murmuras con acento catalán, «pues eso… además…»
Kalev murmura con acento ruso, «además qué?»
Kalev mordisquea despacio el interior de la muñeca de la chica.
Murmuras con acento catalán, «pues que para mi desgracia, por así decirlo, sigo deseándolo, sigo pensando y soñando con él. anoche mismo soñé con él…así que necesito tiempo para que esto baje de intensidad y desaparezca.»
Kalev asiente y entrelaza los dedos con la chica
Kalev la mira, reflexivo
Kalev murmura con acento ruso, «si me dejas, te ayudaré a que pases esa página, Aletheia. Vamos poco a poco, no hay problema.»
Murmuras con acento catalán, «gracias, Kalev.»
Kalev le sonríe
Kalev murmura con acento ruso, «No tienes nada que agradecer, preciosa.»
Aletheia mira su reloj y suspira
Murmuras con acento catalán, «Me voy a tener que marchar, no quiero que se me haga demasiado tarde.»
Kalev le suelta la mano, mira su reloj y asiente.
Kalev hace señas a la camarera para que lleve la cuenta.
A los pocos minutos, la camarera deja la cuenta en la mesa, kalev la revisa y saca su cartera del bolsillo trasero del vaquero, mira los billetes que tiene y deja un poco más del monto exacto de la cuenta y se levanta.
Kalev se guarda la cartera.
Aletheia se levanta también, juntos salen del restaurante.
Comunidad de Madrid; Calle Real
Ves un coche deportivo de color negro aquí.
Kalev espera cerca de la puerta del conductor.
Aletheia desactiva la alarma y abre la puerta del vehículo
Aletheia entra al coche, Kalev empuja la puerta desde fuera.
un coche deportivo de color negro
Aletheia bloquea la puerta y se abrocha el cinturón
Aletheia introduce la llave y arranca el motor
Kalev le toca la ventanilla, aletheia la baja.
Kalev se le acerca, coge su rostro con ambas manos y la besa, primero en las mejillas, luego en los labios.
Aletheia cierra los ojos y gime flojito
Kalev se abre paso con su lengua, Aletheia se deja besar.
Kalev termina el beso mordisqueando y chupando sus labios carnosos.
Aletheia abre los ojos y lo mira
Kalev le sonríe
Kalev murmura con acento ruso, «Ve con cuidado, si puedes, avisa cuando llegues. Nos vemos mañana, preciosa.»
Murmuras con acento catalán, «hasta mañana, Kalev.»
Aletheia sube la ventanilla y pone la calefacción.
Aletheia coge su móvil, lo desbloquea y pide autorización.
[EFU] Aletheia: «permiso para ingresar en zona s.y. finca el Renacimiento»
[EFU] Arais: «s.y. autoriza la solicitud»
Aletheia pisa el acelerador y el coche se pone en movimiento
Mientras conduce, aletheia se recrea en el beso; de pronto la mirada y la boca de Santana invaden su mente, ella bloquea esos pensamientos y vuelve a recrearse en los labios y la lengua de Kalev.