Punto de vista: Aurora
Las gemelas se encuentran en el salón de la casa, sentadas en el sofá una al lado de la otra y con 2 tazas de café bien calientes sobre la mesita.
Casa de Auxita
Ves un sillón de relax negro, un jarrón decorativo verde, Jarrón de cristal, Un sillón de relax modelo Lockhart en color crema, PC all in one 25-h124mo, Un cuadro con un paisaje boscoso, Una mesa redonda de cristtal, y la piedra filosofal aquí.
Te encuentras con Auxita.
Auxita se sienta luego de haber dejado la bandeja con ambas tazas de café y la jarra por si alguna quiera beber más. Aurora la mira, evaluándola de arriba a abajo.
Auxita señala una de las tazas
Auxita dice: «esa es para vos.»
Aurora mira la taza y asiente, acercándola hasta ella y tomándola con ambas manos.
Dices: «no se te habrá ocurrido endulzarla con azúcar para mí, verdad?»
Auxita mira a su hermana y niega levemente
Auxita dice: «por eso te señalé una taza en específico, hermana.»
Aurora asiente
Dices: «bueno, al grano nena. qué es lo que te tiene tan jodida? por qué te querías matar, eh?»
Aurora bebe café mirando a su hermana, seria
Auxita sorve café, bajando un poco la mirada y suspirando
Auxita dice: «bueno, como ya te conté él…»
Auxita suspira nuevamente e intenta reprimir sus ganas de llorar.
Auxita dice: «está preso, lo detuvieron hace ya un tiempo.»
Aurora interrumpe
Dices: «y habrá sido por ser un santito de la deboción de los soldados, no?»
Aurora sigue bebiendo
Auxita niega varias veces
Auxita dice: «claro que no, ahora paso a contarte. Le pagó a un sicario para que mataran a una soldado, además de que le hallanaron la casa y encontraron armas blancas y de fuego, drogas tanto permitidas como no permitidas…en fin, sarta de cosas, Auro…»
Aurora deja la taza sobre la mesa y mira a su hermana, desafiante.
Aurora suspira
Dices: «con qué pedazo de sorete te viniste a meter, en serio no puedo entenderte.»
Auxita no puede evitar que una lágrima ruede por su cara, asintiendo
Auxita dice: «yo…yo…»
Aurora suspira y se termina el café.
Dices: «bueno, no te pongas en modo víctima ahora que necesito saber lo demás. Sabés si se va quedar mucho tiempo preso? No te dan información sobre él?»
Auxita se recuesta en el sofá
Auxita dice: «ni idea, la verdad. si es por mí…»
Auxita se incorpora y mira a aurora
Aurora devuelve la mirada
Dices: «qué?»
Dices: «completá…»
Auxita suspira
Auxita dice: «no sé, ni yo misma sé, hermana. es que yo le amo y…»
Aurora no termina de acreditar lo que su hermana le dice y la mira, indignada
Murmuras: «impresionante…»
Dices: «veo que va estar difícil que te recuperes. Al menos si decís amarle…no te das cuenta que es una mierda, un flor de gil?»
Aurora se sirve más café, Auxita le señala un sobre de edulcorante sobre la mesa
Auxita dice: «sí, claro que sé eso racionalmente, pero no se le puede mandar al corazón, eso no.»
Dices: «pero al carajo los versos románticos, Auxi. Despertate de una jodida vez y date cuenta que ese tipo te come el cerebro aún sin estar presente, te perjudica!»
Aurora suspira y da vueltas a su café luego de endulzarlo
Auxita mira a aurora y asiente
Auxita toma entre sus manos su taza de café, que ya casi se enfría
Dices: «pero, me dijiste que me ibas a contar de dónde venían esos soldados, qué hacen acá, qué está pasando.»
Auxita bebe su café y se lo termina
Auxita le comenta con detalles a Aurora sobre la situación en general; cómo trabajan EPS y S.I, lo que ocurre con Imperium y los hijos de eva…todo lo que Melany le ha contado. También se toma un tiempo para comentarle sobre el motivo por el cual inicialmente perseguían a Diego, a lo que Aurora resopla, fastidiada
Dices: «pero entonces, vos sabiendo lo que hizo él…igual lo bancaste? Definitivamente…»
Aurora se interrumpe, intentando controlarse
Auxita dice: «sí, es que creí que las cosas serían diferentes, todo este tiempo él me lo hizo creer.»
Dices: «bueno, y ahora qué? Pensás seguir con esta locura? Pensás que todavía es el hombre de tu vida y quien sabe qué otras ridiculeces?»
Auxita lo piensa por un momento
Auxita dice: «es que justo ese es mi problema, no puedo pensar con claridad. Por eso necesito que…»
Auxita suspira
Aurora la ve y decide entrar fuerte
Aurora se le acerca más y toma su cara con ambas manos, para que la mire
Dices: «vos sabés que esta no es la primera vez que te pasa algo así, verdad? Al menos ya debería hacerse familiar para vos un craso error como este. El primero se llamó Julio, y el segundo se llama Diego»
Al oír esto, Auxita se queda ensimismada en sus pensamientos un instante.
Aurora le deja espacio mientras toma más café; pasan unos minutos y como Auxita no reacciona, su hermana le habla
Dices: «Y bien?»
Auxita sigue sin reaccionar
Aurora la mira, expectante
Aurora se acerca y la zarandea un poco
Dices: «aterrizá, nena»
Auxita sale de su ensimismamiento y mira a su hermana
Auxita dice: «sí…perdón.»
Dices: «bueno, escuchame. Lo primero, entregame cualquier cosa que te apegue a él. Si tenés alguna foto, algo que te haya regalado…no sé, algo que te lo recuerde. Me refiero a Diego, claro»
Auxita piensa
Auxita dice: «bueno, creo que con todo esto no hubo demasiado tiempo para que me regalara cosas, pero sí hay algo que yo le iba regalar a él sorpresivamente, pero ahora…»
Auxita se levanta, va rápidamente a su habitación; tras rebuscar por un instante regresa, trayendo el arpa artesanal que pensaba entregarle a Diego en algún momento
Aurora ve el arpa, muy sorprendida
Murmuras: «hijo de…mil»
Dices: «pero, esto te habrá costado carísimo!»
Auxita asiente
Dices: «pero claro, eso del amor, si es que existe, idiotiza desmedidamente»
Dices: «bueno, eso me pertenece ahora; todo lo que daña hay que cortarlo de raíz. Si en algún momento ese tu terapeuta o no sé qué, te puede decir cómo dejar de relacionar esto con el sentimiento a ese individuo y por supuesto, si aprendés a hacerlo, te lo voy a devolver. OK?»
Auxita deja el arpa sobre el sofá al lado de Aurora y asiente; busca en su cartera la llave de la casa de Diego y le entrega también
Auxita dice: «es lo único material que tengo que lo relaciono con él, porque las cosas que me regaló ya no las tengo, mayormente flores y chocolates»
Aurora tiene las llaves en la mano, las mira y ve nuevamente a su hermana a los ojos
Dices: «ya vivías con él? Me contabas que tiene un amigo y que su papá también estaba, no? Quien te viera habrá pensado que los 3 te violaban»
Aurora piensa en las palabras que dijo y se sobresalta
Dices: «decime…te sometieron?»
Murmuras: «no se te ocurra mentirme…»
Aurora suspira, furiosa
Auxita la mira y niega
Auxita dice: «no, al menos en ese sentido se portaron bien, mi suegro me miraba con ojos deseosos pero yo no le daba importancia»
Aurora suspira
Dices: «te fuiste a meter a la boca del lobo y no te diste cuenta? Qué hubiera pasado si hacían contigo lo que con esa menor, estando bajo los efectos del alcohol o las drogas? Pero es que no pasó esa idea jamás por tu puta cabeza?»
Auxita se estremece un poco, pensando en esa posibilidad
Auxita dice: «en serio no me lo planteé nunca; además, a su papá lo mataron poco tiempo después de que empecé a estar con él. Y Jorge bueno…no parecía…»
Pasaron poco más de media hora con el intercambio, Auxita intentando justificar a Diego y sus acciones y Aurora, entre regaños, intentando que su hermana fuera consciente de los peligros que estaba corriendo
Dices: «bueno, y ahora lo otro. Todavía te querés morir?»
A Auxita se le ensombrece el rostro
Auxita dice: «la verdad, no sé lo que quiero; estos días me están costando mucho y esos pensamientos siguen, aunque me tranquilizó hablar con esta chica en gran parte, al menos sé que no me persigue a mí, que el problema no es conmigo, que hasta quiere protegerme»
Auxita le muestra el sticker del comunicador que le dio Melany, pegado a su cartera
Auxita dice: «esto me dio ella, es un comunicador que puedo usar si me veo en peligro, ella va a recibir las alertas y si no viene ella misma, seguro envía a los soldados con quienes colabora para que me ayuden»
Aurora ve el comunicador detenidamente
Dices: «Y vos lo aceptaste, sin más. Debería darte vergüenza haber pensado lo que pensabas luego de su gesto contigo»
Auxita dice: «eso es lo que más sentí, hermana. Yo estaba cegada por las palabras de Diego, no me daba cuenta que él tenía un poder impresionante sobre mí, para hacerme creer lo que él creía. Yo no era la que hablaba, ni sentía, ni pensaba; eran sus pensamientos manifestados a través de mí»
Aurora asiente
Dices: «hasta que al fin hacés conciencia, ves que no era tan difícil? Necesitabas que alguien, bueno, yo te lo dijera. Y esa chica que me contabas hizo su parte también; no sé cómo es que vos misma no podés darte cuenta de las cosas, tendrías que ir despertando y no confiar en cualquier fulano que se te aparece»
Dices: «no te digo que dejes de sentir, porque eso sería como que me pidieras a mí que deje de correr. Pero al menos no sé, equilibrate, evaluá las cosas con mayor detenimiento y ni que decir a los hombres, al menos si pensás meterte en su cama en un futuro. Ya no te dejes seducir fácilmente»
Auxita escucha a su hermana y deja entrever una pequeña sonrisa
Dices: «me decías hace rato que en internet puedo encontrar más información sobre Melany y su grupo? ya me contaste pero me gustaría saber más»
Auxita asiente
Auxita va nuevamente a su habitación y le trae a Aurora el portátil, se lo entrega.
Auxita dice: «esa es la notebook que venden acá, configurada con los sistemas modificados y demás cosas. Yo hace un tiempito que no la uso, así que te regalo para que veas allí lo que quieras. Hay una sección de videos también donde hay mucho que ver»
Auxita dice: «esa computadora también en cierto modo la relaciono con él, ya que habíamos ido a comprarla juntos, me dijo que era indispensable tenerla para informarse»
Aurora recibe el portátil de manos de su hermana y asiente
Dices: «bien; todo lo que te relacione con él me lo das, y veo yo que hago. Y sabés? deberías pensar que pasó con él lo que pasó con Julio; se fue y nunca más volvió»
Auxita mira a su hermana
Auxita dice: «y si lo sueltan?»
Auxita dice: «él me va buscar, va querer explicarme…»
Aurora suspira
Dices: ya voy a pensar en algo para cuando salga ese pendejo. Vos por ahora solo ocupate de centrarte en otras cosas, no sé, andá a trabajar, hacé algo útil con tu vida porque si no te ocupás, después pensás en boludeces como matarte y demás»
Auxita dice: «sí, voy a aprovechar que está encerrado y leer mis libros de autoayuda»
Auxita murmura: «hermana, te agradezco que estés acá, seguramente te jode que te haya hecho viajar hasta acá para algo tan estúpido…»
Aurora deja la notebook en un rincón y se acerca a Auxi
Murmuras: «de todas formas, ya ese día de nuestro cumpleaños algo no me terminó de cerrar; y cuando me llamaste el otro día no pude evitar acordarme de cuando Julio desapareció…tengo en la mente la imagen de cuando entré a nuestro cuarto y te vi a punto de meterte mil pastillas a la boca, por eso vine sin pensármelo; sos bulnerable y me temo que lo vas a seguir siendo por el resto de tus días, al menos que te dejes de joder y decidas cambiar»
Auxita recuerda
Auxita murmura: «creo que vos tenés la fortaleza que debería ser para las 2, auro…»
Auxita murmura: «quiero estar bien, ningún hombre merece que yo esté así por él. Ayudame a entender eso, no me dejes sola, por favor»
Dices: «es lo que intento hacer, pero no puedo meterme en tu cerebro. pero bueno, no te preocupes, acá voy a estar todo el tiempo que me requieras; total, mamá y papá están bien, Graciela y sus hijas están con ellos y bueno, la pasan bien. Lo único que no me gustó dejar fue mi trabajo pero ya, eso es detalle menor»
Dices: «ponete las pilas, despertate y simplemente dale al acelerador y andá para adelante, mamá y papá te necesitan, nos necesitan»
Dices: «y por favor, dejá de ser boluda y pendeja por una vez en tu jodida vida, te perjudicás sola y después llorás»
Auxita asiente, sonríe un poco y sin pensárselo, besa a su hermana en la frente, para luego salir disparada; Aurora se levanta y corre tras ella por el pasillo que conduce a las habitaciones, Auxita entra a la suya riendo flojito y cierra su puerta, Aurora se queda en el humbral de la misma, algo molesta.
Murmuras: «te voy a cobrar esto, boba!»